Lectura del santo evangelio según san Marcos (13,33-37):
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Mirad, vigilad: pues no sabéis cuándo es el momento. Es igual que un hombre que se fue de viaje y dejó su casa, y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara. Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos. Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: ¡Velad!»
EN ADVIENTO SALVEMOS LA NAVIDAD
El tiempo va pasando y se acerca la Navidad. Una Navidad que se aventura muy distinta.
Una Navidad que hay que salvar. Así lo hemos oído. Se trata de la Navidad Consumista, que puede dar un poco de esperanza a nuestra maltrecha economía.
Sin embargo, la parroquia nalign=»justify»os propone para este tiempo de adviento que hoy comenzamos: Salvar la Navidad, pero la Navidad de Belén, que lleva desde hace tiempo acechada por los virus del consumismo y del egoísmo. Y es urgente, porque salvar la Navidad es salvar a la humanidad.
Por eso, queremos que nuestras parroquias sean hospitales de campaña en donde la Navidad y la humanidad entera se pueda curar. Ya hemos colocado en sus paredes una Cruz Roja gigante.
Hoy comenzaremos viendo los síntomas de la Navidad y que son los de nuestra sociedad. Habrá que estar atentos.
