Lectura y reflexiones del día (2/8/2021)

Lectura del santo evangelio según San Mateo (14,13-21):

En aquel tiempo, al enterarse Jesús de la muerte de Juan, el Bautista, se marchó de allí en barca, a un sitio tranquilo y apartado. Al saberlo la gente, lo siguió por tierra desde los pueblos. Al desembarcar, vio Jesús el gentío, le dio lástima y curó a los enfermos.
Como se hizo tarde, se acercaron los discípulos a decirle: «Estamos en despoblado y es muy tarde, despide a la multitud para que vayan a las aldeas y se compren de comer.»
Jesús les replicó: «No hace falta que vayan, dadles vosotros de comer.»
Ellos le replicaron: «Si aquí no tenemos más que cinco panes y dos peces.»
Les dijo: «Traédmelos.»
Mandó a la gente que se recostara en la hierba y, tomando los cinco panes y los dos peces, alzó la mirada al cielo, pronunció la bendición, partió los panes y se los dio a los discípulos; los discípulos se los dieron a la gente. Comieron todos hasta quedar satisfechos y recogieron doce cestos llenos de sobras. Comieron unos cinco mil hombres, sin contar mujeres y niños.


Beata Juana de Aza

Juana nació en la villa de Aza hacia el año 1140. Heredó de su familia el señorío de Caleruega tras contraer matrimonio con Félix de Guzmán. Fruto de ese matrimonio nacieron tres hijos: Antonio (venerable), Manés (beato) y Domingo (santo y fundador de la Orden de Predicadores). De ella se afirma en la obra Vida de Santo Domingo de 1272 que era una mujer «honesta, casta, intachable, prudente y muy compasiva con los pobres y afligidos, brillando por su virtud y buena fama».

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2 de agosto – Beata Juana de Aza

Los hijos de Félix y Juana fueron educados en las virtudes de su madre. Todos los días las puertas del Torreón de los Guzmanes se abrían para repartir alivios y afectos a los pobres, transeúntes y peregrinos. Las vocaciones de sus hijos nacieron de la educación cristiana y vida ejemplar que les fue brindada en su hogar.

La especial devoción de Juana de Aza por el monasterio benedictino de Silos y su santo fundador Domingo, es el origen del nombre de su hijo menor. Tras su muerte entre los años 1202 y 1205, se desarrolló una especial devoción hacia esta santa mujer en todas las localidades cercanas. El pueblo admira y recuerda sus virtudes de compasión, misericordia y generosidad con los más necesitados.